miércoles, 5 de agosto de 2015

Las mujeres no cagan

Ayer soñé que era un escritor y lanzaba mi primer libro en la Feria del Libro de Jesús María, mi libro se llamaba "Las mujeres no cagan" (las cosas que uno sueña), entonces la prensa especializada me preguntaba el porqué del título y entonces yo les decía que en mi vida nunca había visto una mujer haciendo el número dos, "Ni a su madre, ni hermana?" me preguntaban, y yo les decía que no, jamás..

- A mi hija la vi alguna vez de bebé, aclaré, se cagaba en su pañal Huggies con dibujos de Winnie Pooh, pero a partir de cierta edad dejó de cagar
- Y como está usted tan seguro de eso?
- Porque le he preguntado y ella dice que ya no lo hace, y mi hija nunca miente señor periodista
- Y su esposa?, ella tampoco va al baño a hacer sus necesidades?
- Tampoco señor, ella dice que yo cago por las dos, o sea por ella y mi hija, dice que cuando un hombre ama a una mujer entonces él pasa a cagar por ella, dice que es una de esas maravillas de la naturaleza que no necesita explicación, dice que así es y yo le creo porque ella tampoco miente

La prensa quedó muda ante mis alegatos y la conferencia de mi libro iba a acabar de forma exitosa, pero en eso se paró un señor flaco con bigotes y una chompita cuello V azul que se me hacia conocido, "Alumno Arguedas he leído su libro y déjeme decirle que le hace honor al nombre porque es una reverenda cagada", entonces lo reconocí se trataba de mi querido profesor de literatura del colegio, el señor Navarro..

- Que tal profe? que bueno que leyó el libro - dije feliz de verlo
- Además esas tonterías que habla que las mujeres no hacen puffy, se pasa!, que bruto, tarquino y taimado resultó usted (así hablaba mi profe, siempre en difícil)
- Que pena que no le gustó profe
- De verdad alumno Arguedas que Usted me decepcionó, yo que le tenía cariño porque llevaba el apellido de un gran hombre, que obra para mediocre la de Usted

Y dicho esto el profe se acercó hasta el estrado donde yo estaba y comenzó a jalarme la patilla como cuando no hacía la tarea de chibolo, y fue en ese momento que desperté..

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